El papel de los veterinarios en las explotaciones ganaderas ha sido el tema central de la primera Jornada Profesional de hoy, sábado, en Salamaq.
Miguel Ángel García Rodríguez, veterinario clínico de grandes animales y de Veproasa, ha sido el encargado de ofrecer la charla ‘Qué es y qué se espera de veterinarios y ganaderos’, organizada por el Colegio Oficial de Veterinarios de Salamanca.
El objetivo de esta jornada ha sido explicar cuál es la figura del veterinario de explotación, que se va a incorporar a la legislación en breve, una vez que se apruebe el Real Decreto que traspone una normativa europea, y en el que se van a incluir muchas exigencias tanto para el veterinario como para el ganadero; por lo que se ha tratado de explicar qué se va a requerir de ambos porque «al final es un trabajo en equipo y tendrán que trabajar juntos».
Hay que tener en cuenta que, básicamente muchas de las cosas que ya se están haciendo en las explotaciones están contempladas en esa normativa, pero ahora se exigirá llevar un registro muy exhaustivo de todo, porque «lo que no se pone por escrito es como si no se hubiera hecho, como si no existiera», ha recalcado García Rodríguez en varias ocasiones. «Llevamos muchísimos años haciendo un trabajo los veterinarios con los ganaderos pero ahora tiene que quedar todo reflejado en un plan, y sobre todo hay cosas nuevas, con un Plan de Medicamentos Veterinarios y de los antimicrobianos, los antibióticos, en el que es superexhaustivo el control; y los ganaderos deben ser conscientes de lo que se les va a exigir», como controles trimestrales por la resistencia de las bacterias a los antimicrobianos, porque «los antibióticos están dejando de ser eficaces o no lo son todo lo que deberían, lo que lleva incluso a un riesgo para la salud humana y los primeros en ‘pagar el pato’ con las restricciones van a ser los ganaderos, porque hay que reservar antibióticos para la medicina humana «.
Otro de los apartados de la charla ha sido porqué y cómo se producen esas resistencias a los antibióticos. «Se está exigiendo un sacrificio muy importante tanto a los ganaderos como a los veterinarios, pero a los ganaderos nadie les ha explicado el por qué se produce esa resistencia» y es el momento de explicarlo.
Durante la jornada, además, se ha tratado de concienciar a los asistentes de que todas las explotaciones ganaderas productivas (un corral doméstico no) necesitarán tener un veterinario de explotación designado, aunque son libres de cambiarlo, pero éste no será el único que podrá intervenir en la granja, pero sí va a ser el responsable de todo lo que tiene que ver con la sanidad, el bienestar animal y la bioseguridad de la explotación, «es el responsable absoluto de todo».
Entrando más en detalle, Miguel Ángel García Rodríguez ha explicado -a través de diapositivas- que ese veterinario de explotación ganadera será el encargado de diseñar un Plan Sanitario Integral (PSI) de la ganadería, que incluye las actuaciones sanitarias, de higiene, bioseguridad, uso racional de medicamentos veterinarios y plan de bienestar animal, y será el encargado también de llevarlo a cabo.
Hay que tener en cuenta que dicho PSI es personalizado para cada explotación ganadera y que como mínimo debe incluir un plan de vigilancia y control de enfermedades parasitarias, un protocolo de vigilancia pasiva sanitaria, un muestreo rutinario de enfermedades de control específico, un plan vacunal y un plan de uso racional de medicamentos veterinarios.
Todas las actuaciones que se realicen dentro de ese Plan Sanitario Integral deben quedar registradas, así como las medidas correctores propuestas, y dicho documento debe ser firmado tanto por el veterinario de explotación como por el ganadero.
Dentro de todas estas medidas y actuaciones, García Rodríguez ha hecho hincapié en el Plan de Uso Racional de Medicamentos Veterinarios, ya que su elaboración es esencial y debe incluir los antimicrobianos prioritarios y excluidos, la valoración trimestral de uso de antimicrobianos, el control de almacenamiento de medicamentos en uso y sobrantes, el registro de tratamientos y el plan de eliminación de medicamentos veterinarios. El borrador del Real Decreto incluye un control del consumo habitual y trimestral de antimicrobianos por explotación; para lo que será muy importante tener en cuenta la resistencia a los antimicrobianos, es decir, a los antibióticos, pues cuando esto ocurre se puede aumentar la dosis, cambiar de antibiótico o investigar nuevas terapias antimicrobianas, que es lo más complejo, largo y costoso.
Por último y a modo de conclusión, García Rodríguez ha recordado que toda explotación debe tener un veterinario responsable, cuya colaboración con el ganadero es indispensable, y debe haber un Plan Sanitario Integral debidamente diseñado y con registros, en el que el bienestar animal debe ser parte imprescindible; sin olvidar, que hay que hacer un uso responsable de los antibióticos; y que toda la actividad ganadera bajo el control sanitario en colaboración con los servicios veterinarios, garantizan la salud pública en múltiples frentes para beneficio de la sociedad, entre ellos, la lucha contra las resistencias a los antibióticos.