La tercera jornada de SALAMAQ’21 se inició este domingo con un emocionado homenaje a Pedro Vaquero, quien durante casi 40 años estuvo vinculado a la Asociación Nacional de Criadores de Raza Morucha de la que era secretario en el momento de su fallecimiento, el 31 de marzo de 2020.
“Hablar de Pedro Vaquero es hacerlo de alguien que significa mucho para Salamanca”, destacó el presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, al tiempo que remarcó que “era el alma de esta asociación de Morucha y estamos muy orgullosos de su legado”. “Diligente, discreto, callado… para cualquier cosa que se necesitará ahí estaba Pedro para solucionarlo”, recordó.
Junto a su emocionada viuda y al hijo del difunto, Iglesias señaló que Pedro Vaquero “simboliza el dolor de cientos de familias que han pagado el peaje de esta maldita pandemia”. “Hoy es buen día para recordar a gente como él, que ha contribuido a que la ganadería de Salamanca este hoy en el lugar en el que está”, subrayó y calificó de “honor” tributarle el homenaje que finalizó con el descubrimiento de una placa en su memoria.
Para Jesús Castaño, presidente de la Asociación Nacional de Criadores de Raza Morucha, Pedro Vaquero “era un hombre muy detallista que disfrutaba solucionando las necesidades de los ganaderos”. Durante su labor como secretario de la Asociación, Vaquero no faltó una sola semana a la lonja “donde disfrutaba y se mostraba dispuesto para lo que se pudiera necesitar”.
Finalmente, el ganadero francés Gerard Granier, quien cumple este año tres décadas de presencia en SALAMAQ calificó a su amigo Pedro de persona “muy humana, atentísima y respetuosa”. Era, recordó, “un apasionado de la raza morucha” y conocer su fallecimiento “fue un shock y nos supuso muchísima pena”. “Su trabajo y su lucha siempre quedarán”, añadió para cerrar su intervención y escuchar el sonoro aplauso que el público asistente brindó a la memoria de Vaquero.
