“Un buen balance que da medida de la calidad de los productos”. Así resumía el vicepresidente de la Diputación de Salamanca, Carlos García Sierra, los datos correspondientes al año 2018 que este viernes se daban a conocer durante la presentación del V Informe Anual sobre el Sector Agrario en Castilla y León presentado por Unicaja Banco.
El análisis realizado por la entidad bancaria revela que la renta agraria se duplicó en la última anualidad completa hasta alcanzar los 2.469 millones de euros merced al aumento en todas las provincias.
En esa misma línea, la producción agraria alcanzó los 5.991 millones de euros y representa el 11 % de la producción española gracias a un crecimiento superior al 30 % respecto a 2017. De ese incremento es en su mayor parte responsable la producción vegetal, que casi duplicó su valor respecto al año anterior, alcanzando los 3.018 millones de euros. Y en ese ámbito, el cultivo líder fue el cerealero, “que sigue siendo referente con un valor de producción que supone el 50 % del total y más de un tercio de la producción total española”, detalló la analista Felisa Becerra, quien también apuntó a las plantas forrajeras como grandes impulsoras del crecimiento.
Por su parte, la producción agrícola creció en todas las provincias por encima del 60 % hasta el punto de que la de Castilla y León representa el 15% de la producción nacional y crece un 1,2 % respecto a 2017 merced al aumento de las producciones de bovino y porcino.
En cuanto al comportamiento del tejido productivo, este también ofrece valores positivos en consonancia con la corriente alcista al lograr una subida del 7 % respecto al año anterior. Ese crecimiento propicia que alcance casi un tercio del total empresarial de la región y el 10 % del total nacional.
Los datos apuntan de igual modo a la industria cárnica como motor que concentra una cuarta parte de la facturación agroalimentaria seguida por los lácteos y los productos de alimentación animal junto a ganadería y pastas alimenticias, reveló la experta quien también avanzó que las cifras para 2019 “no son tan buenas”.
En el plano más institucional, el vicepresidente de la Diputación resaltó que las conclusiones del informe del año 2018 ponen de manifiesto “el compromiso de algunas instituciones con el campo de Salamanca, un sector en constante evolución en pos de la eficiencias productiva y del aumento de conocimiento que favorece la mejora de esa productividad”.