El Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Castilla Duero ha ofrecido dentro de la Feria Salamaq una ponencia sobre el “pastoreo racional de dehesa en vacuno de carne extensivo”, ofrecida por Gabriel de la Mora.
“El objetivo es exponer los principios básicos del pastoreo porque considero que el margen no está en los detalles, sino en los principios. Se investiga mucho, los ganaderos miran detalles en alimentación, sobre todo en base a los intereses de las casas comerciales, pero en lo básico muchas veces no se piensa. Hay temas como la gestión del agua, el diseño de los cercados, o si realmente, se están aprovechando los pastizales como se debería”.
A juicio de Gabriel de la Mora, los ganaderos, en general, tienen pocos conocimientos de los pastos de sus explotaciones. “No saben que especies tienen realmente en sus pastizales. Hay muchos que dicen que el pasto crece solo y no me preocupo, y otros ven la solución en implantar determinadas especies platenses, cuando la realidad es que en los terrenos de Salamanca, tenemos los mejores pastizales del mundo. Los americanos, neozelandeses, australianos, han venido aquí en los años 60 a buscar nuestras especies. Ahora todos utilizan el trébol subterráneo u otras especies que están aquí desde siempre”, ha subrayado.
Gabriel de la Mora ha defendido que no hacen falta grandes inversiones de fertilizantes o de implantación de praderas para conseguir cargas ganaderas elevadas. “Con cuatro principios básicos bien adaptados o técnicas intensivas de pastoreo, es suficiente para generar grandes pastizales de alta productividad, elevar las cargas de alimentación y aumentar la rentabilidad de las explotaciones”, ha indicado.
El ponente ha considerado que el problema de la sobrexplotación de la dehesa es la mala gestión política. “Con unas técnicas de pastoreo sin más no se cambia la estructura que tenemos de la ganadería. Ahora mismo, el 30% de los ingresos de una explotación de vacuno de carne procede de ayudas de la Administración, y eso provoca que el ganadero, al tener dos fuentes de ingreso, dedique tiempo a las dos. En cambio, en Argentina, donde todos los ingresos entran de la explotación, se tienen que dedicar a producir terneros y gestionar pastizales. Esas políticas obligan a realizar determinadas prácticas que muchas veces son contradictorias con la propia gestión de la dehesa”, ha señalado.
A su juicio, para acabar con esa sobre explotación, la primera premisa es que sea el propio ganadero el que tenga capacidad para decidir. “Los técnicos no podemos venir a recomendar nada al ganadero cuando no trabajamos en el terreno, cuando no hay una estructura de extensión agraria, como la que existía antes. La realidad es que la investigación y desarrollo real en Salamanca es muy limitado, no hay estructuras y lo poco que hay no tiene contacto directo con el campo. Lo ideal sería unir esos dos campos y en esta feria hemos visto ejemplos claros de esos beneficios”, ha sentenciado.